En esta luminaria se esconde una alquimia sutil, donde lo elemental y lo sublime convergen en un juego de líneas y texturas. Las formas ortogonales se entrelazan como fórmulas antiguas, y la piedra y la madera se transmutan en un lenguaje visual que busca la esencia pura.

La esencia de esta luminaria radica en la conexión entre la calidez de la madera y la sutileza de la piedra talco. La madera, cuidadosamente trabajada para revelar sus vetas y tonos naturales, aporta un toque orgánico que invita a tocar y sentir su historia. La piedra talco, con su superficie delicada y aspecto mate, crea un contraste sutil que le añade a la pieza un aura de serenidad. Su textura suave, casi aterciopelada, complementa la madera sin opacarla, y juntos logran una armonía visual y táctil que da profundidad y presencia a la luminaria.

El proceso de diseño y producción de esta luminaria es una cuidadosa fusión de tradición y técnica, donde cada etapa está guiada por el respeto hacia los materiales y la búsqueda de la simplicidad en su máxima expresión. Comienza con la concepción de un diseño basado en la armonía entre la madera y la piedra talco, donde las formas geométricas se entrelazan con la naturaleza orgánica de los materiales. La madera se trabaja meticulosamente para resaltar sus vetas y texturas, mientras que la piedra talco, suave y sedosa, se corta y pule con precisión para mantener su integridad y belleza. A lo largo de este proceso, se emplean técnicas avanzadas de ensamblaje que permiten una integración perfecta entre los materiales, creando una pieza única que refleja tanto la artesanía como la innovación.